Muchas veces nos ocurren cosas que no nos gustan o hacen que nos enfademos. Y es super curioso, pasado el tiempo necesario lo más probable es que estemos incluso agradecidos. Solo necesitamos tiempo para comprender el aprendizaje, para ver el lado positivo. Para sentir la nueva oportunidad ⭐️
Esta semana estuve algunos días sin poder tocar la guitarra. Por lo visto hice un mal gesto y me dolía un dedo al apretar las cuerdas. Son cosas que pasan, de hecho no es la primera vez que me ocurre en tantos años, pero mi primera reacción fue de cagarme en todo🙀
No entendía nada. No había hecho nada raro, ninguna tontería, al menos de forma consciente. El caso es que no podía tocar. Pero en seguida lo vi claro, estaba echando balones fuera, estaba quitándome responsabilidad. Lo fácil es culpar al mundo y lamentarnos de las cosas que no nos gustan. Es muy fácil ponernos el traje de víctima pero no quería gestionarlo así. Ni de coña 😼
Acepto las cosas, y como no puedo hacer nada, decido poner el foco en las cosas que sí puedo hacer. Aproveché la oportunidad para crear un montón de ideas, trazar mejor la ruta que estaba llevando a cabo y reorganizarme. Aproveché la oportunidad para escucharme, ha sido genial.
No sabía si iba a poder estar sin guitarra un día o una semana. Esa incertidumbre es la que hay que aprender a gestionar emocionalmente, ahí está la clave, porque al final todo en esta vida es incertidumbre. Todo. Y también te digo que menos mal, sino menudo aburrimiento 🙈
El caso es que estoy super agradecido de esta pequeña pausa que el universo me ha dado, ya estoy tocando de nuevo y para que el aprendizaje sea completo quería compartirlo contigo ❤️
PD: El vídeo lo grabé el lunes, fue increíble 😍 Te gusta?