Ayer toqué en acústico más de una hora en la plaza principal de Galway y estoy deseannnnndo compartirte esta bonita experiencia! ❤️
Quedé con mi amiga @alorenss para comer curry sentados en el pie de la iglesia (tradición de los sábados haha) y le dije que se me había ocurrido algo, una locura de las mías, y por supuesto se unió 😬
Quería tocar en la calle! No tengo ampli ni repertorio, pero todo eso solo son resistencias. Fuimos a Eyre Square, coloqué el ipad en un atril recién comprado y toqué las canciones que me apetecían, solo, con mi voz y mi guitarra. No sé cuanto tiempo, hora y pico, hasta que me permitió el frío 🙈
Y no pudo ser más maravilloso. Es una pasada cómo sientes cuando una canción atrapa o llega a la gente. Cómo se sientan en algún lugar cercano para escuchar, cómo tararean, cómo alguno bailotea. Recuerdo, por ejemplo, una pareja que se paró así a lo lejos, mirándome, y abrazados estaban susurrando ‘Karma Police’ de Radiohead. Pero mención especial a la siguiente historia 😍
Estaba tocando ‘No dudaría’, de Antonio Flores, cuando una niña de 4 o 5 años viene corriendo hacia mí, se busca en los bolsillos y tímidamente me echa dos monedas en la funda de la guitarra (fueron mis primeras monedas!). Volvió corriendo con sus padres pero al momento se cayó al suelo y se puso a llorar. Su madre la consolaba y entonces fui para allí con la guitarra, sin dejar de tocar la canción, y al verme allí tan cerca, cantando, tocando, bailando, sonriendo, se le fue el llanto de golpe y se animó. Acabamos la canción todos juntos cantando y riendo. Recuerdo que a mi amiga Anna se le escapaban las lágrimas de la emoción ☺️
Lo tengo claro. Por este tipo de cosas merece la pena todo esto. Poder ayudar a los demás a ser un poquito más felices gracias a la música es un regalo del cielo ❤️